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Tras el cuarto intermedio, detuvieron a cuatro mujeres frente al Congreso y hubo gritos contra diputados libertarios

El operativo policial continuaba pese a la pausa en la sesión especial.

Publicado el 31 de enero de 2024|
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La Policía Federal Argentina (PFA) detuvo a cuatro mujeres este miércoles cerca de las 23 en inmediaciones del Congreso de la Nación una vez que se pasó a un cuarto intermedio hasta el jueves al mediodía luego de 11 horas de sesión especial en Diputados de la Nación por el tratamiento de la Ley Ómnibus. En la salida del edificio legislativo algunos manifestantes insultaron varios representantes libertarios que abandonaban el lugar.

Según algunas versiones de gente presente, poco antes de las 23 -la sesión se había pausado antes de las 22- las mujeres junto a un contingente mayor cantaba el himno en la puerta del Congreso cuando los efectivos dispersaron la manifestación y las arrestaron. Al parecer, una de ellas resultó herida.

Un diputado nacional de Unión por la Patria, el abogado Eduardo Toniolli, intentó subir al camión policial con ellas para representarlas, pero los uniformados se lo impidieron.

La Comisión Provincial por la Memoria señaló: “Policía Federal detuvo a 4 mujeres cuando estaban sentadas cantando el himno nacional frente al Congreso. No había razón para sus detenciones, el grupo de manifestantes estaba por desconcentrar y lo hacía de manera pacífica. Durante el traslado al móvil de la Federal, Abril Rocío Taborda, Agustina Maira Goncalves, Ivana Bunge y la cuarta joven fueron violentadas. Este accionar arbitrario e ilegal es una síntesis del operativo a lo largo del día. Al menos seis personas fueron detenidas”.

A esa hora también el legislador porteño Ramiro Marra (La Libertad Avanza) corrió desde la puerta del Congreso hasta un auto porque un grupo de manifestantes lo insultó.

El representante liberatrio luego dijo en redes: “Que griten, que agredan, que lloren y que pataleen. Nosotros no les tenemos miedo. La gente nos votó para poner de pie a la Argentina que ellos destruyeron y para encaminarla en el rumbo para volver a ser una potencia mundial, donde los violentos ya no tienen lugar. Nosotros tenemos el coraje y la determinación necesarias para lograrlo, y vamos a ir con todo hacia adelante. Jamás vamos a retroceder. Sus insultos y sus agresiones son una medalla en mi pecho”.

Algo similar le sucedió a Alberto Benegas Lynch, quien fue escoltado por un efectivo de la PFA sobre la calle Riobamba.

Durante la tarde hubo otra persona detenida por efectivos de la PFA, luego de los incidentes y la represión desplegada por efectivos federales para liberar las avenidas alrededor del palacio legislativo, a fin de aplicar el protocolo antipiquetes.

Para la ministra de Seguridad de la Nación Patricia Bullrich el operativo fue exitoso: “Con las fuerzas federales desplegadas garantizamos la libre circulación. El Protocolo para el Mantenimiento del Orden Público se cumple. Ley y orden”.

En tanto, la Comisión Provincial por la Memoria argumentó: “Efectivos de Gendarmería, de la Policía Federal y la Motorizada de la Federal avanzaron con violencia contra una columna de manifestantes que estaba sobre la calle Rivadavia para dispersar la convocatoria. Los efectivos golpearon con escudos y arrojaron gas pimienta contra las y los manifestantes. En una situación de extrema gravedad y contrario a los protocolos internacionales vigentes, se observó también la presencia de policías sin identificar y portando armas de fuego. También se sumaron agentes de la Prefectura al operativo. En el despliegue de las fuerzas en las inmediaciones del Congreso, la violencia se repite y una manifestante fue detenido por la Policía Federal. Ignacio Villegas fue detenido sin ninguna razón por agentes de la Policía Federal mientras intentaba resguardarse de los gases lanzados por los efectivos policiales. Fue golpeado y reducido con violencia en el suelo, antes de ser ingresado a un móvil de esa fuerza”.

De modo similar, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) afirmó: “A un agente federal lo fotografiaron con un distintivo de ultraderecha. Esto es muy preocupante y más todavía si aparece como una provocación por ser parte del operativo de seguridad en una protesta frente al Congreso. Con el protocolo anti manifestaciones, Bullrich derogó la obligación de que los policías estén identificados, lo que dificulta el control de esta y cualquier otra irregularidad en la actuación policial. Además de llevar la identificación libertaria, estaba armado en una manifestación y eso está prohibido”.

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