Una gran cantidad de vecinos, militantes y ciudadanos se movilizó este lunes por la noche hasta el hotel familiar de Olavarría al 1600, en Barracas (Comuna 4), para exigir Justicia por el asesinato de Andrea Amarante, Pamela Cobas y Roxana Figueroa, las tres mujeres atacadas por un hombre que les arrojó un artefacto explosivo el lunes pasado. Hay una cuarta mujer agredida que está en recuperación. Durante la marcha se denunció que se trató de un lesbicidio y un ataque de odio por la orientación de las víctimas.

Esta protesta inició en la Plaza Colombia de la avenida Montes de Oca y desde allí marcharon hacia el edificio en el cual ocurrieron los hechos.

“El crimen de odio fue por ser lesbianas, y por las condiciones precarias de vivienda. Con la promoción de discursos de odio y de sus políticas contra el acceso a la vivienda, el Estado es responsable”, señalaron desde el colectivo Ni Una Menos en sus redes sociales.

Asimismo, agregaron: “Llamamos al fortalecimiento de la comunidad y al acompañamiento como forma de resistencia contra la violencia política y simbólica”.

El acusado permanece detenido y el juzgado a cargo de la causa analiza si esta persona es imputable o no. Los vecinos relataron que ya había amenazado a las víctimas, agrediéndolas de forma verbal por su orientación sexual.